Nosotros somos los verdaderos capitalistas.
Nuestro objetivo: aprender las lecciones que nos da la vida!
Y capitalizarlas para dejar de repetir las mismas pegas y trascenderlas.
Aprendiendo tanto de los aciertos como de los desaciertos.
Capitalizando y avanzando, capitalizando y creciendo!
Capitalizando y compartiendo!
Y uno de los desaciertos más grandes ha sido el de condenar nuestro lado oscuro.
Porque queramos o no, siempre tendremos un poco de bichos adentro…
Esperando a que les abramos la puerta para salir a jugar...
Mejor entender, aceptar, hacer las paces con uno mismo y dedicarnos a estar despiertos…
Para poder reconocerlos cuando se nos quieren salir y poder elegir la mejor manera de responder.
Lo que se resiste, persiste...
Cuando se trata de la relación con nosotros mismos:
Mejor hagamos el amor y no la guerra!